
La formación de edema es una condición esperada después de una rinoplastia y se presenta en casi todos los pacientes. Se observan hematomas e hinchazón intensos, especialmente alrededor de los ojos, una semana después de la operación. Estos hematomas e hinchazón, que aumentan al segundo y tercer día, suelen desaparecer espontáneamente en una semana. El proceso de curación e inflamación después de una rinoplastia varía de persona a persona. Dado que se intervienen los tejidos subcutáneos durante la operación, se observa edema durante la curación de estos tejidos y de la piel superficial. De hecho, el edema es parte del proceso de recuperación. El edema, que disminuye desde la primera semana, desaparece por completo en aproximadamente 6 meses a 1 año. El edema es más intenso y prolongado en pacientes con piel más gruesa. Sin embargo, pase lo que pase, estas son complicaciones temporales y habituales. Por lo tanto, los pacientes deben tener paciencia, especialmente con el edema, durante el proceso de recuperación.
Su médico le ayudará a reducir más rápidamente el edema que se produce después de la rinoplastia. Durante el proceso de cicatrización, se utilizan frecuentemente compresas frías para aliviar el edema. La aplicación de compresas frías también contrae los vasos sanguíneos delgados que causan sangrado y previene los posibles hematomas posteriores. Las compresas frías no solo son beneficiosas contra el edema, sino que también tienen un efecto analgésico.
Tras el alta hospitalaria, los pacientes también pueden eliminar el edema, la hinchazón y los hematomas con la aplicación de compresas de hielo en casa. Al hacerlo, asegúrese de colocar un paño o toalla entre la compresa y la piel. De lo contrario, podría lesionarse la nariz. Además, consumir alimentos menos salados también reducirá el efecto del edema. Por ello, debe evitar las comidas saladas y, en especial, la comida chatarra como las patatas fritas durante las primeras semanas. Dormir con la cabeza elevada es un método clásico, pero muy efectivo, para prevenir el aumento del edema; por lo tanto, intente dormir con dos almohadas.
En resumen, es inevitable que aparezcan hematomas e hinchazón, aunque no sean deseables, especialmente después de una rinoplastia abierta. Esta situación, que es completamente normal y esperable, puede desaparecer más rápidamente con algunos métodos aplicados por el paciente y el médico. Estas son complicaciones temporales que suelen desaparecer espontáneamente en una o dos semanas. También puede realizar el masaje recomendado por su médico para reducir el edema.